jueves, 12 de noviembre de 2009


Mi nombre es Yolanda y tengo un hijo diagnosticado inatento (TDA). Es decir, mi hijo tiene déficit de atención sin hiperactividad. Está medicado con Concerta36 y le ayuda, pero la medicación no es suficiente. Desde casa debemos hacer un trabajo ingente para ayudarle.

Empezó suspendiendo y está llegado a alcanzar notables y algún sobresaliente. Por supuesto, esto es gracias al esfuerzo del niño, a la ayuda del colegio, al empujón del metilfenidato, a la constancia de sus padres...pero también gracias a uno de esos inventos que las madres nos sacamos de la manga para ayudar a nuestros hijos.

Desde hace años conozco el método Glenn Doman de estimulación infantil, lo he probado, he constatado que funciona y me gusta. En principio es un método basado en la repetición que juega con la memoria visual. Dos veces al día se le muestran al niño un grupo de tarjetas (bien confeccionadas en cartulina, o al ordenador). El niño siempre lo ve como un juego y se queda con ganas de ver más, porque son sesiones muy cortitas, de apenas 5 minutos.

Y yo me preguntaba ¿por qué algo que sirve a los bebés no va a servir para un niño más mayor con dificultades de aprendizaje? Al fin y al cabo, el método Doman se aplica en escuelas para niños con Síndrome de Down, retraso mental y otras discapacidades con excelentes resultados.

Yo veía que, en 2º de Primaria, a mi hijo ya se le pedía que memorizase conceptos en los libros de texto. Y para él era literalmente imposible. Ni qué decir tiene, ahora en 3º, donde tiene que estudiar varias páginas en una sola tarde. Así que decidí que debía ayudarle de algún modo y adapté la metodología de Glenn Doman a nuestras necesidades.

Así, fui creando presentaciones de Power Point, guardadas como vídeos de cada tema y de cada asignatura. El trabajo es muy duro: hay que escanear todos los libros de texto del curso (o comprar otro lote para casa), leerse los libros enteros, hacer esquemas y resúmenes, buscar fotos que interesen y estimulen al niño, montar la presentación Power Point y pasarla a formato de vídeo.
Luego queda lo más fácil. El niño ha de ver estos vídeos 2 veces al día, cuanto más separadas estén las sesiones, mejor. Puede ver una por la mañana antes de ir al colegio y otra a medio día, o cuando llega del colegio por la tarde, o antes de acostarse...

Para el niño no es pesado, es como ver la televisión. Mi hijo lo ve al ordenador. Y en esto sí que coinciden todos los especialistas, da igual hiperactivo (TDAH) que inatento (TDA), todos se quedan inmóviles y atentos ante el monitor del ordenador o el televisor.

El resultado es increíble.

Así que, si a mi hijo le ha ayudado tanto, también podrá ayudar a otros niños con fracaso escolar y/o problemas de aprendizaje. De modo que he pensado que puedo hacer estas presentaciones para otros padres que no tengan tiempo de confeccionarlas.

Dejo aquí el ejemplo nº1:

Es un vídeo del tema 2 de Conocimiento del Medio de Anaya, de 3º de Primaria, de casi 6 minutos de duración, con muchos contenidos. Yo recomiendo que el niño no comience viendo todo de vez, o se va a colapsar. Debe ir viendo, según van avanzando en la clase. También es aconsejable, que la primera vez que lo ve, esté acompañado de sus padres y vayan parando de vez en cuando para comentar cosas. Por ejemplo, cuando se nombran las masas de hielo, salen dos imágenes impresionantes a comentar: La Patagonia argentina (donde se le puede hacer ver al niño lo pequeñitas que son las personas que se ven, comparadas con la enorme masa de hielo) y el iceberg (donde podemos comentar que la mayor parte está sumergida y fuera de la vista.

Sólo es necesario verlo con ellos y comentarlo la primera vez. Ellos recordarán su comentario cada vez que lo vean solos.

Los archivos van con audio que reproduce el texto de su libro y con imágenes que fijarán en su memoria lo que está aprendiendo.

Puedo hacer vídeos de cualquier asignatura de Primaria, excepto de idiomas (el motivo es que estoy a caballo entre dos idiomas adicionales y no pronuncio bien ninguno de los dos). Puedo preparar una sola presentación o todas las asignaturas de un curso entero.

Lo más importante es que cada presentación es personalizada para ese niño. Hay muchos libros de texto con diferentes contenidos y hay que hacer cada presentación a la medida. Siempre que puedo, me gusta usar fotos del niño, o de sus personajes favoritos (Ben10, Hannah Montana, etc). Esta técnica ayuda mucho a captar su atención.

El ejemplo nº2:

Este corresponde al tema "Los reptiles" de Conocimiento del Medio, ed. Anaya, para 2º de Primaria. Es un vídeo mucho más sencillo, de apenas 1 minuto de duración, con poco contenido que permite hablar más pausado, pero con imagenes impactantes para atraer su atención.

Hay que tener en cuenta que para lograr 1 ó 6 minutos de vídeo final, se necesitan varias horas de trabajo.

¿Cómo conseguir estas presentaciones?

Como cada editorial tiene proyectos educativos distintos, que se traducen en libros de texto diferentes, y para conseguir la mayor efectividad en el aprendizaje, debo usar el mismo libro de texto que utiliza el niño.

¿Cuánto cuestan?

Dada la diferencia de trabajo que llevan unas presentaciones de otras, es difícil establecer precios sin ver el texto. Para hacerse una idea aproximada, el ejemplo nº1 puede costar unos 35 euros, mientras que el ejemplo nº 2 puede costar unos 12 euros.

Pensad que una hora de clase particular ya son 15 euros y las presentaciones podrá verlas cuantas veces quiera.

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